martes, 27 de diciembre de 2005

Chicos jugando al fútbol

A muchos europeos les choca mucho ver algunos barrios destrozados que parecen recién salidos de un bombardeo. No comprenden una vida rodeada de muros derrumbados, paredes caídas, ventanas desencajadas, techos cedidos y todo tipo de objetos abandonados por los suelos. Creo que después del terremoto de 1992 nadie se molestó en limpiar los escombros de manera que -para el europeo desprevenido- un paseo por el caos puede resultar desolador.

Hay muchos motivos que provocan esa desolación. Cada uno tiene los suyos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que serie tan filosófica. Ya veo q egipto hace que la gente piense su propia vida, la metáfora del río, la muerte, sobre lo pequeños o grandes que somos. ¿Le pasaría algo así a Alejandro Magno? (la comparación es un poco sobrada pero no o pude evitar, jiji)
A lo mejor es la suerte de los viajeros que se fijan en algo más que en el exterior. Es algo parecido a lo que describen los antropólogos cuando estudian tribus de otros mundos, e incluso alguno que estudia la suya propia
¿Tendrán este tipo de pensamientos la gente que viene a ver compostela? ¿o benidorm?
Las fotos me encantan. La del retrato del señor sentado la que más.

patrim