sábado, 10 de mayo de 2008

árbol

Algo digno de ser contado. En la oscuridad. Con pensamientos, ojos abiertos o cerrados. Posición fija, horizontal. Respiración rítmica. Piensa. Lo tienes en la mente, ahí está espiral y triángulo superpuestos de forma imposible. Si, digno de ser contado. Cierra los ojos. Respira. Escucha. Corazón latiendo, bombeo en las venas de las sienes, lo percibes por los brazos y en la garganta de tortuga estirada fuera de casa. Haz las paces con el mundo y disfruta de luz y sombra por igual, porque dan formas de la nada -que no existen-, lo llenan, lo cubren todo aquí y ahí. Es un fenómeno. Como todo en la vida, onda, calor, energía, masa, velocidad y sobre todo distancia.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu viaje terminó muy bien como el de los valientes que cual Indiana Jones se internan en el vacío de la existencia, para luego aceptar su condición humana tal cual es.

Aquí estás, al otro lado del túnel.

Gracias por compartir con palabras y con imágenes el viaje más interesante, la aventura más excitante de todas las que puede realizar el ser humano.

N :))