domingo, 29 de noviembre de 2015

j 3

Y bueno, tenía que pasar -cómo no- que me encontrase con Manuel por casualidad en Tokio. Hacía unos quince años que no le veía y de repente nos cruzamos sin querer. ¿Cómo se calculan las probabilidades de esto? Pues como la ecuación para evaluar si en un planeta puede haber vida inteligente -fuera de la Tierra, se entiede- pero a pequeño nivel: tenemos que estar los dos a la vez en el mismo continente (Asia, uno de siete), en el mismo país (Japón, uno de cincuenta), en la misma ciudad (Tokio, una de ciento diez), en el mismo barrio (Harajuku, uno de cuarenta y siete), en el mismo lugar (el Meiji-jingu, pongamos a ojo de unos diez sitios posibles en la zona) y a la vez (es decir, pasar en el mismo minuto por ahí, lo cual es uno entre unos setecientos veinte que tenemos de luz). Nos da una posibilidad entre veintiséis mil millones, así a ojo.

Que en España te toque el sorteo del Euromillón -y es la más difícil de todas las loterías, estadística pura- tiene una posibilidad entre setenta y seis millones. Solo.

Pues vaya.

(sonrisa)

No hay comentarios: