viernes, 12 de noviembre de 2010

sin título



Sales de casa, cruzas el East Village y llegas a Union Square, coges por los pelos el metro línea 5 o 4 (la RAE ya no deja poner tilde a esa o, era mi tilde favorita) hasta Bowling Green. Diez minutos o algo menos. Sales al parque desde donde ya ves el mar. A tu izquierda está el ferry. Corres porque va salir. Llegas a la rampa, el barco está allí con los motores encendidos. Entras. Tiene un aspecto entre cutre y usado. Mejor no mencionar el estado de los aseos. Son como veinte minutos tristes pasando al lado de la Estatua de la Libertad; alguien saca una foto que no vale para nada. Llegas Staten Island. Bajas con la multitud. Esperas el bus 84 pero resulta que no pasa en domingo. 74 pues. Miras el mapa. Está lejos, muy lejos. No hacen los planos a escala. Manhattan es enano comparado con esta isla que tiene campos de golf, parques, barrios y barrios donde hay mezquitas, judíos e incluso ves una iglesia baptista donde dan misa en mandarín. El 74 es brusco, lleno de personajes. Una mujer negra que grita. Un yankee joven con bastón y pinta de derrotado. Poco a poco se van bajando. Te mareas. Empiezas a pensar en vomitar cuando, de repente, lo ves. Pulsas el botón de parar. Zas. Abajo, junto a un puente y unas casas que no pueden ser más americanas, de madera pintada hace treinta años, banderas en el porche, adornos horteras, un Camaro del 73, un saloon de cerveza con una rubia fumando fuera. Tras las casas, en el canal que se llama Arthur Kill, el cementerio de barcos. Private property. Joder.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

herrumbrados,oxidados,desechados,olvidados..y pensar que alguna vez surcaron magestuosos los mares..si hasta parece una metáfora de la condición humana..de la condición humana en el capitalismo de la "private property"..excelente imagen

Kayele dijo...

Seguiré usando las tildes diacríticas caiga quién caiga!!!
Habráse visto tamaña ofensa, sólo un truhán ha podido urdir tan deplorable guión!!
Desgraciados!!!