miércoles, 7 de noviembre de 2007

Chica mirando el mar

Íbamos en un barco en la bahía de Ha Long cuando nos fijamos en una chica francesa que iba (imaginé que eran novios; y lo eran) con un vietnamita que también hablaba francés. Se trataba de una pareja silenciosa y extraña, ella se tumbaba lánguidamente sobre él que parecía ignorarla (y la ignoraba), todo esto con una lentitud y parsimonia que al principio me hizo gracia pero que, pasadas unas horas, empezó a fastidiarme de manera sorda y tonta; me apetecía llevarles un café para que se moviesen un poco o hablasen o yo qué sé, los sudokus les habían raptado el cerebro.

Entretanto el barco avanzaba y la tarde con él. El sol de verano y la brisa del mar de China eran muy agradables así que me senté en la popa a estar descalzo un rato y pensar en la vida y esas cosas. Estaba ahí cavilando cuando ella se acercó y se puso casi a mi lado, cerrando los ojos como sólo ella podía hacer (lentamente, muy lentamente) y dejándose estar sin más. De reojo no veía si me miraba o no y hasta ahí todo había sido paz y tranquilidad y todas esas estupideces así que decidí sacarme un poco de nervio y hacerle una foto lo más cerca posible. No debía enterarse y no por nada en especial sino por evitar la vergüenza extrema y los malentendidos porque a mi ella no me gustaba ni una pizca, era sólo como ir a pescar, pero cualquiera le decía eso (en francés) si me pillaba. Y mi cámara no es discreta o silenciosa ni nada de eso. Al menos la llevaba encima, siempre lo hago cuando estoy de viaje.

Empezó a temblarme la mano. Dios, estaba muy cerca. No podía mirar porque como he dicho no sabía si me vería las intenciones y a freir puñetas. Una sola oportunidad. No puedo, me dije. ¿Y así dónde quieres llegar? ¿Harás fotos de paisajes de ahora en adelante? Tío, puede que la foto sea una mierda pero tienes que hacerla, hay una línea que debes cruzar y está aquí y ahora. Si la haces no sólo serás feliz; habrás hecho lo que quieres hacer. Lo intento; dios, lo intento pero no soy capaz. No pienses eso, hazla ya.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jeje, creo que te dejó hacer ya que se sintió halagada frente a tanta indiferencia de su novio.
Es imposible que no te viera a ti y a tu Cannon 20D apuntándole, ya que de lo contrario sólo queda pensar que en efecto los sudokus le habían comido el cerebro...jejee

N.

ramón dijo...

No me pilló, en serio :D